25 Mar El policarbonato
Tras la visita del grupo IRPEN, areaarquitectura nos habla de las ventajas de los materiales de construcción plásticos y más concretamente del policarbonato celular. El policarbonato es un material tecnopolímero cada vez más utilizado en la construcción de edificios y viviendas, especialmente en cerramientos y fachadas. Esto se debe principalmente a la transparencia que lo define, la cual permite aprovechar la luz natural del sol, reduciendo el gasto de energía derivada del uso de luz artificial. El policarbonato permite así crear paños aislantes transparentes o traslúcidos con una gran relación interior-exterior. Característica que los arquitectos agradecemos y nos permite una gran libertad en el diseño de viviendas y otros edificios. Se trata de un material muy resistente frente a los golpes, prácticamente irrompible y, sin embargo, muy ligero, lo cual facilita y abarata su coste de transporte.
Una de sus mayores ventajas es su durabilidad. El policarbonato aguanta perfectamente el paso del tiempo a través de los años gracias a su composición, la cual permite a este material resistir la erosión natural y la provocada por los rayos ultravioleta.
Su comportamiento frente al fuego lo convierte en un material no sólo atractivo y durable, sino también seguro frente a situaciones de temperaturas extremas (desde menos de cuarenta a más de ciento veinte grados Celsius). Esto es debido a que el policarbonato no es ignífugo, lo cual le confiere esas propiedades termo-aislantes. Sus propiedades acústicas también lo hacen idóneo para la separación de ambientes y espacios, aislando ruidos molestos y sonidos indeseables tanto en el interior como en el exterior de la estancia.
Sus usos y aplicaciones van mucho más allá del cerramiento de nuestros edificios. Entre algunos de sus usos más socorridos están sus aplicaciones a la mampostería, utilizándose como juntas de unión; también como refuerzo para bóvedas en naves industriales, grandes almacenes o centros comerciales, gimnasios y piscinas. Algunos de sus otros muchos usos en la arquitectura y construcción son los siguientes:
- Muros cortina
- Fachadas translúcidas, decorativas y funcionales
- Fachadas y paredes translúcidas con un alto aislamiento térmico
- Cubiertas
- Lucernarios
- Dientes de sierra
- Ventanales
- Marquesinas
El gran abanico de colores y texturas disponibles en el mercado, junto con la finura de su acabado lo convierten en un material elegante de un alto valor estético compatible con todo tipo de ambientes, desde atmósferas de trabajo y oficina hasta espacios y ambientes más cálidos e íntimos como los que podemos buscar en nuestra vivienda. Es un material muy versátil con el que arquitectos, diseñadores e interioristas podemos realizar infinidad de diseños y construcciones.
Por último, las placas de policarbonato son también reciclables, constituyendo así una de las alternativas más sostenibles a la hora de construir la fachada u otros elementos de nuestros edificios y viviendas bioclimáticas. Se trata pues, en resumen, de un material de construcción económico y ecológico con propiedades aislantes que lo convierten en un material idóneo para colocar en cerramientos y fachadas de una manera rápida y fácil sin sacrificar por ello ninguna de las características deseables en la arquitectura moderna más contemporánea.